Motivaciones personales


Tenía 15 años cuando tuve la oportunidad de visitar Valencia por primera vez. Volé desde mi natal Ciudad de México para visitar a mi hermana mayor Cristina, quien ya llevaba 10 años viviendo en España, y por lo menos 4 años en Valencia. Me había comentado que vivía en un barrio muy “alternativo” en donde cada vez había más y más propuestas interesantes sobre arte y gastronomía. Yo con mis 15 años y un interés creciente por estos temas, me emocioné mucho al saber que algo así existía, y más aún que yo podría ser de alguna forma cómplice de este cambio que se estaba experimentando. Ella solía compararlo con un barrio de similar categoría de la Ciudad de México llamado “La Roma-Condesa” y estaba muy emocionada por poder establecer junto con su esposo Andrei en este barrio de Ruzafa, una Galería de Arte y Estudio de Diseño al lado de un taller mecánico. Proyecto que eventualmente maduraría a ser FreeZia Concept, que hoy, 2021 existe sobre la calle Cuba.

He de admitir que al llegar al barrio me sentí un poco decepcionado. Las calles no me parecían interesantes, y los locales poco destacables u originales. Mis expectativas sobre el posible alcance de esta zona quizá eran muy altas, o mi entendimiento sobre un “distrito” de arte y gastronomía, como era la Roma-Condesa en Ciudad de México, era completamente diferente a lo que mis ojos en ese momento estaban viendo. Aún así continué descubriendo el barrio de Ruzafa y poco a poco entre el arte urbano de la zona, una cafetería llena de libros, y demás tiendas curiosas entendí el encanto que había en la zona. Lo interesante estaba en los contrastes que se generaban entre el día y la noche. Entre un despacho de arquitectura llamado “Dass Project” inaugurando su nuevo e innovador escaparate, frente a un “puticlub” de toda la vida que lleva por nombre “Los Ángeles de Charlie”.

Hoy con 25 años vivo y trabajo en este barrio, y no me cabe la menor duda de que ha cambiado por completo. Con 15 años no era capaz de poner en palabras lo que mi intuición y mi hermana me decían, pero ahora sé a lo que se referían. Tras 10 años el proceso de gentrificación que en aquella época estaba ocurriendo, o decían que ocurriría; ahora ha ocurrido y parece que se ha estabilizado. Como sucede con todo cambio, siempre habrá escépticos y temerosos, y es normal pues el progreso no es bueno por sí mismo ni mucho menos. Lo importante siempre será hacia dónde se progresa, y sobre todo cómo se va dirigiendo y acotando este progreso. 

Comentarios

Entradas populares